El 1º de Abril de cada año se conmemora el Día Nacional del Donante de Médula Ósea en celebración del aniversario de la puesta en funcionamiento del Registro Nacional de Donantes de Células Progenitoras Hematopoyéticas creado por la ley 25.392 y que funciona bajo la órbita del Incucai.
En 2003 se creó el Registro Nacional de Células Progenitoras Hematopoyéticas, CPH, base de datos nacional de donantes voluntarios de médula ósea.
El registro da respuesta a personas con indicación de trasplante que no tienen un donante compatible en su grupo familiar. Desde su creación en 2003 más de 500 argentinos recibieron un trasplante con donante no emparentado.
Este día se estableció con el fin de difundir la importancia de la donación voluntaria de CPH, con las que actualmente se tratan diversas enfermedades hematológicas como leucemia, anemia aplástica severa, linfoma y problemas metabólicos e inmunológicos.
Los familiares son los mejores donantes, pero si no se cuenta con ellos (lo que ocurre en más del 70% de los casos) se recurre a una red de registros internacionales que agrupa a más de 10 millones de donantes voluntarios.
Debido al trabajo constante de grupos de pacientes e instituciones de la comunidad y a la excelencia de profesionales y centros con que se cuenta, este tipo de trasplante se efectúa actualmente en el país; entre el año 2003 y el 2005 se realizaron 52 trasplantes.
Existen 42 centros habilitados para la inscripción de donantes; con la colaboración de ONGs y medios de comunicación se han incorporado hasta el año 2006 más de 18.000 personas como donantes voluntarios.
La médula ósea (CPH) es un tejido esponjoso ubicado en el interior de los huesos, no debe ser confundida con la médula espinal que pertenece a los tejidos nerviosos. El conjunto de CPH, es el encargado de producir las células de nuestra sangre (glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas).